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Las estaciones climatológicas comparadas con las astronómicas

3 - 4 minutos

Courtesy of Pixabay.com

Seguramente habrá observado que los meteorólogos y climatólogos definen las estaciones de forma diferente a la primavera, el verano, el otoño y el invierno " tradicionales " o astronómicos. Entonces, ¿por qué las estaciones climatológicas y astronómicas comienzan y terminan en fechas diferentes? En pocas palabras, porque las estaciones astronómicas se basan en la posición de la Tierra con respecto al sol, mientras que las estaciones climatológicas se basan en el ciclo anual de la temperatura.

Las estaciones astronómicas

La rotación de la Tierra alrededor del Sol es la base del calendario astronómico, en el que se definen las estaciones con dos solsticios y dos equinoccios. La rotación natural de la Tierra alrededor del Sol constituye la base del calendario astronómico, en el que definimos las estaciones con dos solsticios y dos equinoccios. La inclinación de la Tierra y la alineación del sol sobre el ecuador determinan los solsticios y los equinoccios.

Los equinoccios marcan los momentos en los que el sol pasa directamente por encima del ecuador. En el hemisferio norte, el solsticio de verano cae alrededor del 21 de junio, el solsticio de invierno alrededor del 22 de diciembre, el equinoccio de primavera o vernal alrededor del 21 de marzo y el equinoccio de otoño alrededor del 22 de septiembre. Estas estaciones se invierten pero comienzan en las mismas fechas en el hemisferio sur.

Debido a que la Tierra realmente viaja alrededor del sol en 365,24 días, se necesita un día extra cada cuatro años, creando lo que conocemos como Año Bisiesto. Esto también provoca que la fecha exacta de los solsticios y equinoccios varíe. Además, la forma elíptica de la órbita de la Tierra alrededor del sol hace que la duración de las estaciones astronómicas varíe entre 89 y 93 días. Estas variaciones en la duración y el inicio de las estaciones hacen que sea muy difícil comparar de forma coherente las estadísticas climatológicas de una estación concreta de un año a otro. Así nacieron las estaciones climatológicas.

Las estaciones climatológicas

Los meteorólogos y climatólogos dividen las estaciones en grupos de tres meses, basándose en el ciclo anual de la temperatura y en nuestro calendario. Por lo general, consideramos el invierno como la época más fría del año y el verano como la más cálida, siendo la primavera y el otoño las estaciones de transición, y en eso se basan las estaciones climatológicas. La primavera climatológica en el hemisferio norte incluye marzo, abril y mayo; el verano climatológico incluye junio, julio y agosto; el otoño incluye septiembre, octubre y noviembre; y el invierno, diciembre, enero y febrero.

La observación y la predicción de los fenómenos meteorológicos condujeron a la creación de estas estaciones, que están más vinculadas a nuestro calendario civil mensual que las estaciones astronómicas. La duración de las estaciones climatológicas es también más consistente, oscilando entre los 90 días del invierno de un año no bisiesto y los 92 días de la primavera y el verano. Al seguir el calendario civil y tener menos variación en la duración y el inicio de las estaciones, resulta mucho más fácil calcular las estadísticas estacionales a partir de las estadísticas mensuales, ambas muy útiles para la agricultura, el comercio y otros fines diversos.

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